“Los
estereotipos describen a los ingenieros de software como socialmente ineptos e introvertidos,
con la mente enfocada solamente en las computadoras”, escribe el psicólogo Timo
Gnambs en el Journal of Research and Personality.
Esta
afirmación puede causar molestia e indignación en los ingenieros de software,
por dos posibles razones: la inexactitud del estereotipo o lo trillado que está
el estereotipo y que todo el mundo está cansado de oírlo. Por ello Gnambs
decidió hacer algo al respecto, probar si existe alguna relación entre rasgos
de personalidad y la programación.
Personalidad de un programador
Gnambs
inició observando los Cinco Grandes rasgos de personalidad: apertura a la
experiencia, conciencia, extraversión, agradabilidad y neuroticismo. Es
importante señalar que este conjunto de características es a menudo criticado
por no ser exhaustivo (es evidente que hay muchas otras dimensiones de la
personalidad) y también por no tener ninguna base real en una teoría que explique
por qué estos factores son importantes, de dónde vienen, o cómo se relacionan
entre sí.
No
obstante, los cinco grandes rasgos parecen relativamente estables dentro de los
individuos, con la misma gente dando respuestas similares cuando se les da la misma
prueba. También se correlacionan con otros factores, como el comportamiento en
el lugar de trabajo y el éxito académico, por lo que parece que es algo
significativo y consistente.
Gnambs
pensó que había una buena probabilidad de que dos factores en particular
estarían relacionadas con la aptitud en la programación: la escrupulosidad (la
tendencia a ser ordenado, disciplinado y obediente) y apertura a la experiencia
(una tendencia a la imaginación, nuevas ideas, y la aventura). Razonó que los
programadores tienen que ser conscientes y orientados a los detalles para ser
buenos en su trabajo, y también lo suficientemente imaginativos para encontrar
soluciones creativas a los problemas.
Si
los estereotipos populares no tienen ninguna base en la realidad, también
podríamos pensar que el neuroticismo tampoco; además podríamos ver una
asociación negativa con la extraversión y la amabilidad, es decir, los
programadores podrían ser más introvertidos y desagradables.
Gnambs
analizó 19 estudios existentes que evaluaban rasgos de personalidad,
inteligencia y aptitudes de programación; En conjunto, estos estudios
incluyeron datos de 1,695 personas de EE.UU., Australia, Inglaterra y Canadá.
El
rasgo con el vínculo más fuerte asociado a conocimientos de programación fue la
inteligencia, La apertura a la
experiencia también era de vital importancia, como Gnambs lo esperaba.
En
cuanto a los estereotipos más populares, se puede “comprobar” uno de ellos, la
introversión: personas con baja
extraversión eran mejores programadores. Sin embargo, El Neuroticismo y la
amabilidad no mostraron ningún fuerte vínculo con la programación. Es decir, “los programadores son introvertidos, pero agradables.”
Esta
investigación no es una guía para saber si alguien va a ser programador. Los rasgos
mencionados tampoco están escritos en piedra para estereotipar si un
programador es bueno o malo.
Fuente:
Ars Technica