La inteligencia artificial china DeepSeek ha sacudido Silicon Valley con modelos avanzados y de bajo costo que compiten con los de OpenAI. Sin embargo, el creador de ChatGPT sospecha que su rival ha construido su tecnología utilizando datos de OpenAI sin permiso.
Según Bloomberg, OpenAI y Microsoft están investigando si
DeepSeek usó la API de OpenAI para integrar sus modelos en los suyos. Microsoft
detectó que, a finales de 2024, se estaban extrayendo grandes volúmenes de
datos a través de cuentas de desarrolladores de OpenAI, las cuales, según la
empresa, estarían vinculadas a DeepSeek.
Además, OpenAI aseguró al Financial Times que ha
encontrado evidencia de que DeepSeek utilizó "destilación", una
técnica que permite entrenar modelos más pequeños extrayendo información de
modelos más potentes. Esta estrategia reduce costos de entrenamiento, pero va
en contra de los términos de servicio de OpenAI, que no ha revelado detalles
sobre las pruebas encontradas.
La ironía de la situación es evidente: OpenAI construyó su
modelo GPT absorbiendo gran parte del contenido de la web sin consentimiento.
El exasesor de inteligencia artificial de Donald Trump,
David Sacks, comentó a Fox News que “es posible” que DeepSeek haya
cometido robo de propiedad intelectual: "Hay pruebas sustanciales de que
extrajeron conocimientos de OpenAI, y está claro que a OpenAI no le gusta nada
esto", afirmó.
"Como líder en inteligencia artificial, tomamos medidas para proteger nuestra propiedad intelectual y trabajamos estrechamente con el gobierno de EE.UU. para evitar que adversarios y competidores se apropien de nuestra tecnología."
La batalla por la supremacía en inteligencia artificial está más encendida que nunca. ¿Es DeepSeek un nuevo gigante tecnológico o solo un clon de OpenAI?
DeepSeek, la IA del momento, envía explícitamente los datos de sus usuarios a China