La creación o codificación de software es sin dudas una de las estrellas de la nueva era económica que se vive en el mundo. La Covid-19 tuvo grandes impactos en los negocios, sobre todo en aquellos regionales, marcando la necesidad de crear nuevas formas de llegada a los consumidores, pero también generando espacios donde almacenar y evaluar los enormes volúmenes de datos que se generaron debido al uso masivo de dispositivos electrónicos.
En este contexto, la demanda de programadores alcanzó
picos históricos, sobre todo ante la necesidad de crear nuevas aplicaciones nativas, sitios web de ventas, así como
software capaz de analizar y brindar recomendaciones sobre lo que se conoce
como “Big Data” o grandes volúmenes de datos.
Así, en pocos meses luego del comienzo de la pandemia,
apenas si había programadores disponibles, ante la necesidad de cientos de
miles de empresas de contratar personal que pueda brindarles una solución ante
los cambios imperativos que trajo la pandemia. Muchos comercios terminaron cerrando sus puertas, tanto porque su
principal sostén de ventas era inviable en ese contexto (por ejemplo discotecas
y bares cerrados por la cuarentena), así como otros que no pudieron adaptarse a término a la nueva
oleada digital.
Es que, en términos reales, la facturación de las empresas que realizan comercio electrónico está
por las nubes. Sobre todo, en años como 2020 y 2021, algunos de los
gigantes por ejemplo de las ventas a domicilio, alcanzaron cifras históricas de
facturación, difíciles
de imaginar en años anteriores. Es que la
pandemia trajo consigo un catalizador de un proceso que ya estaba en marcha
desde mediados de la década pasada, y que ahora con la pandemia comenzó a
lucirse.
La preferencia laboral de las nuevas generaciones
La firma CloudBees,
que realiza distintos tipos de encuestas entre los más jóvenes en edad laboral
o próxima a ello, consultó a los
conocidos como la Generación Z o Gen-Z sobre cuáles serían sus empleos
favoritos o hacia qué carrera se inclinan. Aquellos en el rango de edad entre los 18 y 24 años, indicaron que el desarrollo de software es el principal
interés a la hora de pensar en una carrera a futuro. Y tiene sentido,
porque no sólo es una de las más demandadas, sino también uno de los trabajos
mejores pagados del mundo.
Además, el 27% de los encuestados creen firmemente que
el desarrollo de software tendrá un rol fundamental en la economía del futuro.
Todo esto, está llevando a un nuevo
interés por aprender programación y sus distintos lenguajes, sobre todo en
la realidad de la casi pos-pandemia, en la que es muy fácil realizar un curso de
Javascript mediante la plataforma web de Udemy.com y aprender cuándo se guste y cómo se guste.
Es que, además, los jóvenes de la Gen-Z a diferencia de las generaciones anteriores, quieren ser sus propios jefes desde el comienzo. Tanto en su educación, pudiendo por ejemplo aprender algo mientras van en el autobús, o bien en el trabajo apuntando a conseguir una carrera que les permita trabajar por objetivos cuándo ellos gusten. Se trata de una nueva forma de trabajo, que parece estar instalándose con fuerza en el mundo y que a futuro seguramente dominará el mercado laboral.