Los
reclusos del Departamento de Corrección de Idaho cuentan con tablets fabricadas
por una compañía con sede en Florida JPay. Estas tablets funcionan con
servicios de comunicaciones y datos de CenturyLink, una compañía de
telecomunicaciones con sede en Louisiana. El objetivo de estas tablets es
permitir a los reclusos jugar, comprar música y enviar correos electrónicos a
sus amigos y familiares, pero de alguna manera 364 presos lograron hackear sus
tablets para transferir una suma combinada de $225,000 en sus cuentas. El incidente ocurrió en 2018.
Explotación de vulnerabilidad
La hazaña fue posible después de que los presos explotaron una vulnerabilidad en un software en las tablets JPay – 50 presos que transfirieron más de $1,000 a sus cuentas, mientras que un recluso había acreditado más de $10,000 en su cuenta. En total, el monto acreditado alcanzó casi $225,000.
Jeff
Ray, vocero del Departamento de Correcciones de Idaho le dijo a The
Associated Press que “esta conducta fue intencional, no
accidental. Requirió un conocimiento del sistema de JPay y múltiples
acciones de cada preso que explotó la vulnerabilidad del sistema para acreditar
indebidamente su cuenta”.
En
el momento de publicar este artículo; JPay recuperó más de $ 65,000 en
créditos y suspendió el servicio de descarga de juegos y música para los presos
hasta que compensen a JPay por los daños. Sin embargo, aún pueden usar el
servicio para enviar y recibir correos electrónicos de sus contactos.
“JPay
se enorgullece de brindar servicios que permiten a las personas encarceladas
comunicarse con amigos y familiares, acceder a programas educativos y disfrutar
de opciones de entretenimiento positivas que ayudan a prevenir problemas de
comportamiento”, dijo la portavoz de JPay, Jade Trombetta, en una declaración. “Si
bien la gran mayoría de las personas utilizan nuestra tecnología segura de
manera apropiada, trabajamos continuamente para mejorar nuestros productos y
evitar cualquier intento de uso indebido”.
Esta
no es la primera vez que los reclusos están generando noticias por hackear computadoras
en las prisiones. En diciembre del año pasado, un hombre fue arrestado
después de haber hackeado las computadoras de la prisión para alterar los
registros de la pronta liberación de su amigo. Él ahora está cumpliendo
una sentencia de siete años. En otro incidente, el año pasado, los
reclusos ingresaron al Sistema de Redes Penitenciarias de Ohio para ejecutar
una red de películas ilegales desde la prisión.
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Fuente:
Hackread